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El ordenador central de la compañía Spanair en el que se anotaban las averías de los aviones estaba contaminado con programas informáticos maliciosos cuando se produjo, hace hoy dos años, el accidente del vuelo JK 5022. La computadora, situada en la sede de la aerolínea en Palma de Mallorca, emite una señal de alarma en el monitor cuando registra tres problemas técnicos similares en el mismo aparato. El avión que se estrelló en Barajas hace hoy dos años -murieron 154 de sus 172 ocupantes- acumulaba tres incidencias, que no fueron registradas a tiempo en el ordenador.

Descalificaciones y enfrentamientos por cómo se ha gestionado la investigación del accidente aéreo ocurrido hace dos años en Barajas y la atención a los familiares de las víctimas, se suma ahora la noticia de que el ordenador central que registraba las posibles averías estaba infectado de troyanos. Este dato abre la hipótesis de que no sonase la alarma cuando los flaps y slaps no se desplegaron después de haber anotado correctamente los tres problemas técnicos producidos en el avión del vuelo JK 5022 que finalmente se estrelló.
Un parte interno de la compañía, datado el mismo día de accidente, indica que el monitor estaba contaminado "de troyanos". Estos programas maliciosos pueden ocasionar daños y facilitar los ataques de piratas informáticos. Precisamente, la asociación de víctimas del accidente, personada en la causa, ha pedido al juez instructor, Juan David Pérez, que pida a Spanair todas las anotaciones registradas en ese ordenador en los días anteriores y posteriores al siniestro. El magistrado acaba de dictar un auto en el que ordena a la aerolínea que le facilite tales datos.