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No hay mucha discusión en cuanto a que la mayor pifia de Microsoft en los últimos años ha sido Windows Vista, seguida de cerca por Internet Explorer 6 y los móviles Kin, abandonados por la compañía después de unos meses.

Ahora que han superado ese escollo gracias a Windows 7, los directivos de la compañía se ven capaces de reírse de sí mismos y, por qué no, de la competencia. Así que si su problema fue Windows Vista, tienen bastante claro con qué ha tropezado su rival Apple.

"Parece como si el iPhone 4 pudiera ser su Vista, y eso me parece bien", comentó Kevin Turner, jefe de operaciones de Microsoft, en la Conferencia Mundial de Socios de la compañía.

Los problemas de recepción con la antena del iPhone 4 que pierde cobertura al tocar la parte inferior izquierda, algo especialmente frecuente si se sostiene con la mano izquierda- están siendo un quebradero de cabeza para Apple, y le están costando devoluciones, demandas y que la revista de consumidores Consumer Reports haya retirado su recomendación de comprarse el teléfono (aunque luego aclararon que utilizar una funda o algo de cinta adhesiva resolvía el fallo).

La actitud de la compañía tampoco ha ayudado, con correos electrónicos del consejero delegado de la firma, Steve Jobs, diciéndole a la gente que coja el teléfono de otra forma y promesas de actualizaciones de software para luego reconocer que, en el fondo, eso no arregla nada.

De momento, corren algunos rumores de que habrá una retirada en masa del producto, y Apple ha convocado una gran rueda de prensa para el viernes, en la que no se sabe muy bien qué van a decir.

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